Dos sujetos entran en un departamento oscuro, caliente y húmedo, arrastrando por los brazos a un joven flaco y debilucho. En el departamento, se encontraba Big Leroy, un negro enorme, sudado, hediondo, con cara de criminal, un palillo en la boca y limpiándose las uñas con un cuchillo de carnicero.

Al llegar, uno de los hombres dice:

-Oye, Big Leroy, el jefe ordenó que le des sexo a este sujeto, que para que aprenda a no hacerle al valiente con la gente del barrio.

El debilucho grita desesperado e implora perdón, pero el negro Leroy apenas asiente con la cabeza ignorando los lamentos del joven y dice:

-Pueden dejarlo ahí, en ese rincón, que yo me encargo de ese hijo de puta dentro de un momento. Cuando los dos hombres salen del departamento el muchacho dice:

-Sr. Leroy, por favor, no me haga eso, déjeme ir y le prometo que no le diré a nadie que usted me dejó ir sin castigo. Leroy le dice:

-Cállate la boca y quédate quieto ahí. Al rato, llegan los dos hombres arrastrando a otro individuo.

-Big Leroy, el jefe quiere que le cortes las dos piernas y le saques los ojos a este tipo para que aprenda a no llevarse el dinero del jefe. Leroy les dice:

-Déjenlo ahí, en ese rincón, que pronto resuelvo ese asunto. Poco tiempo después, llegan los mismos hombres arrastrando a un tercer muchacho.

-Big Leroy, el jefe quiere que le cortes el pene a este tipo, para que aprenda a nunca más meterse con la mujer del jefe. Ah!! Y dijo también que le cortes la lengua y todos los dedos para que no pueda volver a tocar a otra mujer en su Vida. Leroy, con voz grave dice:

-Pónganlo ahí en el rincón, junto a los otros dos hijos de puta y yo atiendo la orden del jefe pronto. Cuando se retiran los dos hombres, el muchacho que había llegado primero le dice en voz baja a Leroy:

-Sr. Leroy, con todo respeto, solo para que usted no se vaya a confundir, yo soy al que hay que cogerse, ¿ehhh?!!!